“Bocacha” GONZALEZ SIGUE INVICTO

• El boxeador de Barranquitas Oeste derrotó por nocaut técnico a Diógenes Caunedo en el tercer round.
• Mostrando una excelente preparación técnica, mental y física, el pupilo de José Lino Lemos en el Club Atlético Colón, Emanuel Horacio González, le ganó por nocaut técnico en el tercer round a Diógenes Exequiel Caunedo, representante del gimnasio Thunder Box, ubicado en el norte santafesino.
  De esta manera, “Bocacha” González (55,400 kilos) se mantiene imbatido tras cuatro combates como rentado, siendo ésta la primera pelea que logra terminarla antes del límite de los cuatro asaltos a los que estaba pactada, estando encuadrada en la categoría supergallo. En su regreso a los cuadriláteros luego de algo más de dos años, “Totino” Caunedo (54,700 kilos) ahora exhibe un palmarés de tres victorias (las tres por nocaut), cuatro reveses y un empate.
  El primer capítulo tuvo incidencias parejas. Sabiendo que Caunedo no se guarda nada, el púgil “local” trató de aguantar el avasallante comienzo de su oponente, quien pudo conectar un par de golpes cruzados, aunque no con la potencia necesaria como para hacer demasiado mella en la estabilidad de González, que en el final de la vuelta logró emparejar el trámite.
• Fue fundamental que “Bocacha” no haya “entrado” en el boxeo de “Totino”. En el segundo round, el boxeador de Colón se acomodó mejor y de ese modo comenzó a dominar las acciones; mientras tanto, Caunedo no lograba hacer prevalecer su estrategia de buscar desnivelar el proceso del combate mediante su energía y entusiasmo, y por qué no, la fuerza que recibía de parte de su fervoroso público.
  El tercer round comenzó como terminó el segundo. Con González dueño de la situación, exponiendo a esa altura mejores condiciones técnicas, mentales y físicas, por lo que promediando el asalto, no sorprendió que luego de una derecha cruzada, el exponente de Thunder Box trastabillara sobre el ring, razón por la cual el árbitro, Víctor Godoy, decidió iniciar la cuenta de protección, aún sin que el púgil haya caído a la lona.
  Visiblemente sentido, y equivocándose dada su condición, “Totino” fue al frente igual. Por eso fue fácil presa para “Bocacha”, quien tras una perfecta combinación de golpes, nuevamente dañó la tibia defensa de Caunedo. Era tan visible que el curso del combate no tenía posibilidad de dar un giro, que Godoy tomó la determinación de parar el pleito, cuidando la salud del pugilista que en ese momento era víctima de un castigo innecesario.
• La resolución no le gustó nada a “Totino” Caunedo, quien reaccionó en “caliente” e injustificadamente arremetió contra el tercer hombre sobre el cuadrilátero. Luego de un derechazo en el rostro de Godoy, éste inevitablemente respondió para defenderse del ataque del boxeador. A esa altura, el ring ya estaba poblado por cerca de 20 personas, entre segundos, policías, allegados e hinchas.
  De todos modos, los ánimos pudieron calmarse tras unos minutos. Fue fundamental el hecho de que la gente que acompañaba a “Totino” al Roque Otrino, resolviera llevarlo a los vestuarios para calmarlo